MIQUEL GARCÍA BORDA

MIQUEL GARCIA BORDA

Mi pasión por la dirección empieza el primer día que me pongo delante de una cámara como actor. Mientras realizo mis estudios de interpretación en el Institut del Teatre de Barcelona me “alquilo” como actor en 10 cursos diferentes de dirección de escuelas de Barcelona, donde profundizo mis conocimientos técnicos. Tras años de trabajo delante de la cámara, finalmente doy el paso y me pongo detrás.

En 2000 ruedo mi primer largometraje “Todo me pasa a mí”, una adaptación de la obra teatral “Cambios” que yo mismo interpreté en Barcelona, y en el que colaboro en el guión junto al autor de la obra, Toni Martín. Tengo la suerte de contar con un fantástico elenco liderado por Lola Dueñas, Cristina Brondo y Javier Albalá. La buena acogida de la película en la Mostra de cine de Valencia por parte del público y la crítica me animan a seguir. Ahí empieza mi colaboración con los productores con los que seguiría trabajando un buen tiempo.

En 2002 estreno “Fumata Blanca”, un thriller protagonizado por José Sacristán, Adrià Collado, Héctor Alterio y Cayetana Guillén Cuervo. En este proyecto en el que también participo como guionista, se empieza a definir mi gusto por el thriller oscuro. Presentado en la selección oficial del Festival de Málaga.

En 2007 ruedo “Lazos Rotos” con Ruth Gabriel, que supone un paso más al mundo de la investigación y el destino marcado por la raza y el lugar donde nacemos; y por las ganas que tenemos de romper con ello, aunque no sea fácil, aunque no sea el final deseado.

En 2008 ruedo la mini serie “La Ratjada” para TV3. En este caso, aparte de ejercer como director y actor, también produzco el proyecto con Alter Ego Films. Se rueda en la costa catalana y se lleva a todo el mundo gracias a la universalidad de su tema y a los grandes actores, una vez más, que tengo en el reparto.

Durante todo este tiempo también he realizado videos musicales para diferentes grupos, anuncios y pilotos y programas para televisión.

Sigo pensando que lo grande de todo esto es contar historias, y que lo único importante es tener algo que decir y una cámara para hacerlo.